El enfoque es uno de los aspectos fundamentales en la ejecución de una fotografía, consiste en definir una de las partes de la imagen predominando sobre el resto, resaltándola y dándole más gráfica que al resto.
¿Qué Es El Enfoque?
Desde un punto de vista óptico se llama enfocar a hacer coincidir los rayos de luz reflejados por el objeto u objetos que pretendemos fotografiar con el foco de la lente. ¿Recuerdas cuál era el foco en una cámara digital? Eso es, el sensor.
El enfoque, desde una perspectiva puramente óptica, consiste en la afectación de los rayos de luz reflejados por el objeto u objetos que pretendemos fotografiar. Se puede decir que enfocar es lograr que un objeto aparezca completamente nítido, haciéndose presente de una manera más sólida y definida que el resto de la imagen.
Existen distintos tipos de enfoques:
- Enfoque general: en el que toda la imagen tiene la misma solidez y presencia.
- Enfoque detallado: en el que una parte de la escena aparece con mayor solidez y presencia que el resto, ofreciendo un resaltado sobre el resto de la imagen. Es cuando aparece en escena lo que conocemos como profundidad de campo.
Según el tipo de cámara que utilicemos podremos observar que existe un enfoque manual y otro automático. El enfoque manual obliga al fotógrafo a ajustar el foco hasta obtener el resultado deseado, mientras que el enfoque automático ofrece automáticamente una visión nítida de un punto concreto. Este tipo de enfoque facilita mucho la labor del fotógrafo, pero dependiendo del tipo de imagen que se busque puede ser más práctico un enfoque manual.
Cada modelo de cámara incluye un número de puntos de enfoque, muy útiles para enfocar la imagen. Aunque las más sencillas disponen de pocos puntos de enfoque, la mayoría de las cámaras parten de 9 puntos de enfoque; más que suficientes como para cubrir la imagen focalmente y además, son de gran utilidad para conservar el encuadre.
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